La historia de Beatriz es inspiradora. Desafió su contexto, su carrera y empezó a practicar surf pasados los 40 para estar más con sus hijas. Hoy, practica el mindsurfness: viaja en su camper en busca de las olas adecuadas y lleva un cuaderno en el que dibuja el paisaje con acuarelas, mientras espera el momento para meterse en el agua.
Su historia no te dejará indiferente. Dale al play y descrúbrela.
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